La III Feria de Abril de La Laguna, que se celebró el pasado fin de semana en la Plaza del Cristo de la ciudad a favor de la lucha contra el cáncer, recaudó cerca de 7.000 euros, que irán destinados a la Asociación Española contra el Cáncer (AECC).
Esta mañana, el bailarín y coreógrafo Luilli González, uno de los organizadores de de la feria, entregó una distinción al alcalde de La Laguna, Fernando Clavijo, en señal de agradecimiento por la colaboración del Ayuntamiento lagunero para que esta cita festiva con fines solidarios pudiera celebrarse.
Clavijo subrayó la importancia de “acoger en nuestra ciudad iniciativas solidarias como ésta que contribuyen a causas tan loables como la lucha contra el cáncer y felicitó por ello a la organización y a la AECC, por haber conseguido que esta singular Feria de Abril en La Laguna se haya ido consolidando después de tres años consecutivos”. Clavijo ha añadido que “es un orgullo para una ciudad Patrimonio de la Humanidad como La Laguna convertirse en sede del intercambio de culturas y tradiciones”.
Cabe recordar que la Feria de Abril abrió sus puertas el pasado fin de semana en La Laguna y contó con las actuaciones de los grupos Riapitá y Caracoles con Tomate, venidos expresamente, de forma desinteresada para este evento, desde Palos de La Frontera, en Huelva. En la jornada del sábado la feria contó con las actuaciones de la Academia Ana Lamadrid, la Academia de Jose y Nieves, la Academia de Ana Manrique, el baile de caballos de la Escuela de Equitación El Rocío, la Academia Ele Be Studio, el grupo flamenco de Luilli González, la cantante Natalia Cordero popularmente conocida como “La Reina de la Copla”, Riapitá y Caracoles con Tomate.
El domingo actuaron el Coro Rociero de la Real Hermandad del Rocío de Las Palmas de Gran Canaria, las alumnas del Colegio Luther King, la Academia de Ana Manrique, la Academia de Genaro Arteaga, Támara “La Niña de la Copla” y el baile de caballos de la Escuela de Equitación El Rocío.
La principal novedad de la feria, con respecto a otros años, es que contó con un alumbrado especial estilo sevillano, así como el baile de los caballos de la Escuela de Equitación El Rocío.